A falta de turrón de Jijona o de Suchard, hoy quiero compartir por aquí algunos de los dulces navideños por excelencia en Dinamarca. Ya os comenté en este post los platos estrella de la gastronomía danesa, de la que no soy muy fan (todo hay que decirlo). Pero en el apartado de dulces y postres mi opinión es muy diferente… ¡Son maravillosos! Cuando os conté las tradiciones navideñas de este país mencioné algunos dulces por encima, así que hoy vamos a hincarle el diente en profundidad a este tema:
Æbleskiver
Es inimaginable disfrutar de una Navidad en Dinamarca sin comer æbleskiver. La traducción sería rodajas de manzana porque antaño se cocinaban con esta fruta, aunque hoy día ya no está entre sus ingredientes. Se trata de unos buñuelos con sabor a donut o tortita, que se hacen en una sartén especial. Se vierte en los moldes la masa y se va dando vueltas para que la bolita quede bien hecha. Se sirven acompañados de azúcar glass y mermelada de fresa, y son todo un reclamo para niños y mayores. Y si no tienes esta sartén especial, como es nuestro caso, los puedes comprar congelados y están bien ricos. Los adultos suelen tomar æbleskiver con gløgg, que es un vino caliente con especias, pasas y almendras. Por si os entran las ganas de poneros manos a la masa os dejo aquí una receta en inglés.
Pebernødder
Puede que se lea bien, pero estas galletitas tienen un nombre impronunciable. Son pequeñas, circulares y están confeccionadas con jengibre, canela, pimienta y cardamomo. Son riquísimas y su pequeño tamaño hace que te puedas comer muchas sin darte cuenta. ¡Así que cuidadín porque son adictivas!

Risalamande
Es el postre por excelencia de la cena de Nochebuena en todos los hogares daneses. Se trata de un pudín de arroz con leche al que se le añade un poco de nata, salsa de cerezas y opcionalmente almendras. Y aunque en Dinamarca no hay Reyes Magos, por aquí se estila una tradición que tenemos en España con el roscón de reyes. Se esconde una almendra en la fuente del risalamande y a quien le toque recibe un pequeño detalle. Aprovecho que menciono Nochebuena para comentaros que me resulta muy llamativo lo tradicionales que son los daneses en la cena de este día. Siempre, siempre, siempre se cena lo mismo: cerdo o pato asado, con una guarnición de col lombarda, patata asada y patatas caramelizadas con azúcar y mantequilla.

Honninghjerter
Su traducción literal sería corazón de miel. Se trata de unas pastas de gran tamaño con forma de corazón y que se confeccionan con miel y algunas especias. Una de las variantes más conocidas es la que está recubierta de chocolate. A mí me empalagan un poco, algo muy raro para lo golosa que soy.

Klejner
Para mí son la versión danesa de los chandríos, unas rosquillas típicas de Navarra. Son algo más alargadas y sin el toque de anís, pero las probé recientemente y están riquísimas. Se prepara una masa y se fríe en abundante aceite, y con chocolate caliente, café o leche son todo un manjar para el paladar.

Vaniljekranse
La traducción sería coronas de vainilla, y estas pastas típicas de mantequilla con un toque de vainilla son también deliciosas. Son como las pastas que asociamos a la tradicional caja de latón de galletitas danesas, y aunque se comen todo el año viven su máximo apogeo en Navidad.
Mazapán
Es realmente curioso que en Dinamarca se come mucho mazapán… pero todo el año. No es un dulce asociado a la Navidad, ya que las pastelerías lo utilizan siempre como ingrediente para elaborar algunas tartas o mezclarlo con chocolate. Cuando nosotros llegamos a Dinamarca, en pleno agosto, me sorprendió mucho ver pasteles o pastas con mazapán en las pastelerías. Por si no lo sabíais, Dinamarca alberga una de las empresas productoras de mazapán líderes a nivel mundial. Se trata de Odense Marzipan, que se fundó en 1909 en Odense, la ciudad que vio nacer al famoso escritor Hans Christian Andersen, Y curiosamente, esta firma confecciona el mazapán con almendras importadas de California y España.

FOTO: ODENSE MARZIPAN
¿Os ha entrado el hambre viendo tantas cosas ricas? Os deseo un feliz fin de semana, y aprovecho que hoy es el cumpleaños de mi hermana para brindar por ella con gløgg y decirle lo genial que es. ¡Chin chin, Maribel!
Soy poco de dulce danés. Quizás algún chandrio ya me comería, por celebrar el cumpleaños de Maribel. FELICIDADES.
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Los chandríos daneses te gustarían… ¡y yo creo que los aebleskiver también! Gracias por las felicitaciones a la homenajeada, a ver si te lee. ¡Besicos!
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Gracias Miguel Ángel! si nos dejan lo celebramos con un vinito 😋
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Llevo comiendo varios de estos dulces todo el mes por primera vez, muy muy fan!!! Aunque una vez mas me parecen que se pasan con los dulces en su estilo de vida en general. ¡Buenísimos!
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Jajajaja… Es que es muy difícil no caer en la tentación, ¿verdad? Aunque estoy totalmente de acuerdo contigo, tengo pensado escribir un post sobre el excesivo consumo de azúcar en Dinamarca. ¡Muchas gracias por comentar!
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Después de dos años, algunos ni conocía…será que soy más de txuleton…:)
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Jajajaja… ¿No será que eres más de patxarán con endrinas danesas?
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Que homenaje, gracias Sis! Vaya post más guloso, además de canas hoy me estoy ganando algunos kilos, jajaja..
Ya sabes que yo me comería todos, y por lo que comentas, mis favoritos serían las Pebernodder…
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¡Te mereces homenaje y mucho más! Definitivamente lo que más te gustaría es la tarta de galletas y chocolate que he hecho esta tarde, jur jur….
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Jo qué rica la entrada de hoy 🙂 A mi las Æbleskiver me gustan mucho…todos esos olores deliciosos de la Navidad danesa hhmmmmmmm…
Una curiosidad: con la cena tradicional de Nochebuena (que siempre siempre siempre es la misma): en Jylland, las familias que tienen radiador ponen a calentar paquetes de patatas fritas de bolsa marca Lays para acompañar a los asados, a parte de las otras patatas que mencionas tú…en serio…
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Jajaja… ¡qué bueno! No sabía nada… ¡¡¡Qué patateros son los jutlandianos!!!
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He leído tu artículo babeando, el que más se me ha antojado es el que es como un pudín de arroz con almendras, pero me resulta difícil recordar o pronunciar el nombre jeje. Gracias por compartirnos en este post un poco sobre las delicias navideñas danesas!
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¿Qué hambre entra, verdad? Precisamente me tomé ayer un vasito pequeño con risalamande y estaba delicioso 🥰 ¡Muchas gracias por comentar!
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🤗
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Yo
UYUYUYYYY, mi vena dulce se incrementa con tantas delicias. ¡Qué rico todo! ¡¡¡ Viva la Navidad!!!
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Jajaja… ¡¡Qué viva la vena Álvarez!!
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Buf, lo que menos me atrae de lo que explicas son esos nombres impronunciables. Por lo demás, como alérgico al chocolate que soy, me encanta que en pocos de los que mencionas lleven ese producto, jeje. Me ha entrado hambre, iré a por un chandrío porque si busco unos kKlejner, unos honninghjerter o unos Æbleskiver en mi despensa, me entra la risa y me muero de hambre.
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El chocolate se lo reservan para el mazapán, jeje… Lo de los nombres es de otro planeta, y ya en la pronunciación ni entramos. Ala, tómate un buen trozo de turrón a mi salud, ¡tú que puedes! Besicos.
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